Seguro que si
recapacitamos sobre comida o alimentos típicos de España pensamos en la
tortilla de patatas, la pella o el jamón
ibérico.
Esto se debe a que nuestra gastronomía ha marcado, tanto a nivel nacional como internacional, un antes y un después en la enseña de nuestros platos.
Esto se debe a que nuestra gastronomía ha marcado, tanto a nivel nacional como internacional, un antes y un después en la enseña de nuestros platos.
Pero, ¿por
qué es tan famoso el jamón ibérico?.
Bueno, antes de nada vamos a hacer un pequeño repaso al jamón ibérico.
Lo que más caracteriza al jamón ibérico es, sin duda, su calidad debido al 50% de pureza de raza, como mínimo en cada sujeto.
Además, podemos resaltar una clasificación en los tipos de jamones ibéricos: De Cebo, de Cebo Campo, de Recebo y de Bellota, que es el más famoso y más codiciado.
No es de extrañar que tanta rigurosidad en la selección de la pieza y de su crianza haga de este alimento todo un artículo de alta cocina y lujo gastronómico.
Bueno, antes de nada vamos a hacer un pequeño repaso al jamón ibérico.
Lo que más caracteriza al jamón ibérico es, sin duda, su calidad debido al 50% de pureza de raza, como mínimo en cada sujeto.
Además, podemos resaltar una clasificación en los tipos de jamones ibéricos: De Cebo, de Cebo Campo, de Recebo y de Bellota, que es el más famoso y más codiciado.
No es de extrañar que tanta rigurosidad en la selección de la pieza y de su crianza haga de este alimento todo un artículo de alta cocina y lujo gastronómico.
¿Sabéis que
hace más interesante al jamón ibérico además de su sabor?
Pues es sin duda las aportaciones sanitarias que hace.
Y esto se debe a que el jamón ibérico es alto en ácido oleico, que tiene efectos beneficiosos sobre el colesterol, ya que reduce el colesterol malo a la vez que incrementa el bueno.
A esto hay que sumarle que la grasa del jamón ibérico es la más “cardiosaludable” de todas las grasas animales e incluso más que la de algunos vegetales. ¡Y todo esto gracias a su raza y alimentación!
Su alto contenido de ácido fólico es ideal para un correcto funcionamiento del sistema nervioso y del cerebro y teniendo en cuenta que posee vitamina E, un poderoso antioxidante.
Además, como aporte curioso, también contiene selenio, un mineral muy ligado a los procesos de anti envejecimiento.
Pues es sin duda las aportaciones sanitarias que hace.
Y esto se debe a que el jamón ibérico es alto en ácido oleico, que tiene efectos beneficiosos sobre el colesterol, ya que reduce el colesterol malo a la vez que incrementa el bueno.
A esto hay que sumarle que la grasa del jamón ibérico es la más “cardiosaludable” de todas las grasas animales e incluso más que la de algunos vegetales. ¡Y todo esto gracias a su raza y alimentación!
Su alto contenido de ácido fólico es ideal para un correcto funcionamiento del sistema nervioso y del cerebro y teniendo en cuenta que posee vitamina E, un poderoso antioxidante.
Además, como aporte curioso, también contiene selenio, un mineral muy ligado a los procesos de anti envejecimiento.
Como todo en
la vida, todo tiene un lado bueno y otro malo y es que siempre ha estado la
polémica de que el jamón ibérico posee un alto contenido en grasas y por eso
conduce a la gordura e incluso al sobre peso.
Sin embargo, esto no es cierto, de hecho sí que su porcentaje de grasa puede alcanzar fácilmente el 20%, pero gran parte de estas son insaturadas por lo que benefician al corazón y reducen la presión arterial.
Sin embargo, esto no es cierto, de hecho sí que su porcentaje de grasa puede alcanzar fácilmente el 20%, pero gran parte de estas son insaturadas por lo que benefician al corazón y reducen la presión arterial.
Por lo tanto,
el jamón ibérico no solo es un manjar para el paladar, sino que además es un
gran aporte beneficioso para la salud y el bienestar
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